En Tagle esta vez, Pablo Martín-Carbajal nos vino a presentar su última novela. Es la tercera vez que viene por Suances... le estará cogiendo el gustillo.
El título ya anticipa el leitmotiv de la historia. Es casi un oxímoron
y, como aclaró Pablo en la presentación, "amarga" se utiliza en esta
ocasión como adjetivo, no como verbo.
Tenemos una novela intimista, emotiva y reflexiva que todo aquel que la
lea podrá reconocerse, al menos los que compartimos generación. Habla de
viajes, pero sobre todo de regresos, físicos y en el tiempo.
Son ocho capítulos como ocho relatos, pero unidos por un hilo conductor.
El conjunto transmite la sensación de que nos hacemos una pregunta:
¿Quiénes somos?
Aunque es sencilla de leer no deja de ser densa. Toca unos puntos
fundamentales como son la Amistad, la figura del Padre, la química entre
hermanos, la Familia, el Tiempo...
Técnicamente lo toca casi todo: motivos literarios, ruptura de
linealidad, vasos comunicantes, repetitio... ¡incluso utiliza los
narradores en las tres formas: primera, segunda y tercera persona
Ha creado una serie de personajes, algunos partiendo de personas reales,
que tienen un encanto y fuerza particular. La abuela que graba sus
historias en cintas de casette, el abuelo Clodo, Jesús y su trágico
final, Dani... Tan sólo Carmen, la vecina del 6º que parece conocer a
Rafa -el protagonista- mejor que él mismo, queda algo olvidada. Fue ella
la que le regaló las matrioskas...
Hay guiños a su anterior novela, La ciudad de las miradas, al compartir algunos personajes.
En fin, una novela breve aunque rica, de las que sentimos cercanas y cuyo dramático final supone un acto de valentía.